Es ingrato pensar
que el mundo no suena igual
cuando no estás
y ahora entiendo
porque querías escapar
de mi
Vamos con calma, no,
fingimos calma
y nos espiamos
desde nuestras posiciones
Siempre entre algodones
atentos a los otros movimientos
No quiero nada, dijiste, mentiste
y por nada me entregaste
tu tiempo, tu silencio,
nuestro arte
Presenciando cada amanecer
te sorprendí, te encontré mirandome
No quiero nada, dije,
espero darte todo lo que me pidas
yo sólo puedo ser
quien espera tu regreso
como quien se sabe adorada
por tu contrariada alma
No hay comentarios.:
Publicar un comentario